Cómo pintar una puerta de madera: instrucciones paso a paso
Tabla de contenido
Las puertas de madera pueden instalarse tanto en el interior como en el exterior de la casa, haciendo el entorno más acogedor e incluso seguro, pero requieren cuidados desde su instalación para que duren mucho tiempo.
La pintura es un paso importante y si quieres hacer algo diferente -sobre todo en interiores- puedes apostar por colores más vivos. Lo principal es que la pintura sea adecuada para la madera y que no te olvides del acabado.
¿Estás pensando en pintar tú mismo una puerta de madera? Aquí tienes todos los materiales que necesitarás y cómo puedes hacerlo:
Material necesario
Para pintar una puerta de madera necesitarás
- Papel de periódico o cartón (para proteger el suelo);
- Pintura para madera;
- Cepillos;
- Papel de lija para madera;
- Espátula;
- Bandeja de tinta;
- Rueda;
- Masilla o cera para madera (para madera deteriorada);
- Máscara protectora;
- Destornilladores (para puertas ya instaladas);
- Cinta de crepé;
- Agua y jabón.
Cómo pintar una puerta de madera: ver paso a paso
Después de ordenar todos los materiales, es hora de pintar la puerta. Aquí encontrarás todos los pasos del proceso y sus explicaciones:
Cómo pintar una puerta de madera: elección de la pintura
Lo primero que hay que hacer es elegir la pintura que se va a utilizar. Lo ideal es apostar por algo que se pueda aplicar a la madera y que sea más fácil de aplicar. Algunas pinturas requieren más equipamiento y la pintura sólo la realizan profesionales.
Si quieres pintar la puerta tú mismo, puedes apostar por las pinturas:
Látex PVA
Es el tinte más común para pintar madera, ya sea de forma artesanal o para alguna parte de la casa. El látex PVA es más adecuado para pintar en interiores, es decir, para puertas de dormitorios y otras estancias de la casa. ¿La razón? Su baja resistencia a la humedad y al sol fuerte.
Después de pintarla, la puerta sólo puede limpiarse en seco.
Esmalte al agua
Esta pintura también es ideal para interiores. No tiene un olor fuerte y su secado es rápido, lo que resulta eficaz cuando la idea es pasar más de una mano de pintura. Su acabado es más resistente, por lo que puedes utilizar agua y jabón neutro para limpiar la puerta después de pintarla.
Esta resistencia también garantiza que las puertas exteriores puedan pintarse con pintura esmaltada.
Acrílicos
Las pinturas acrílicas se diluyen en agua y pueden utilizarse para pintar madera. Su resistencia es mayor en comparación con el látex PVA. Es adecuada para ambientes exteriores, ya que no habrá problemas con la exposición al sol y la lluvia.
Lavado y eliminación del polvo
Empiece por limpiar la puerta. Es necesario eliminar todo el polvo y cualquier otra suciedad que esté adherida. Prepare una mezcla de agua y jabón neutro, humedezca una esponja o paño y frótela por toda la puerta. Si lo prefiere, puede realizar esta limpieza después de aflojar las bisagras.
Una vez completado este paso, deja secar la madera.
1. preparación
Para preparar la puerta antes de pintarla, retire todos los accesorios de la puerta. Coja el destornillador y afloje las bisagras y la manilla de la puerta. Si es necesario, retire toda la cerradura.
Si te resulta más fácil, cubre estas partes de la puerta con cinta adhesiva para protegerlas de la pintura. A continuación, forra el suelo con papel de periódico o cartón para no ensuciar.
2. papel de lija
Utilice una mascarilla protectora y guantes si es necesario. Al lijar la puerta, es normal que levante mucho polvo.
La lija es importante tanto para las puertas que nunca se han pintado como para las que ya se han pintado. Repase toda la puerta y repita el proceso si es necesario. Una lija más gruesa puede ser interesante para la madera con pintura.
Ver también: Planificar un armario de cocina: guía con pautas y consejos a seguirUna vez terminado este paso, vuelve a limpiar la madera con un paño humedecido en agua jabonosa. Espera a que se seque y pasa al siguiente paso.
No olvide lijar también los marcos de las puertas, que recibirán una nueva pintura o se pintarán por primera vez.
3. corrección de imperfecciones
Ver también: Decoración de graduación: descubre 60 ideas creativas para fiestas¿La puerta es vieja y tiene alguna imperfección en la madera? Utiliza la masilla o cera para madera para solucionar el problema y la espátula para dar forma. Espera a que se seque y, si lo crees necesario, líjala de nuevo, sólo en la zona donde se aplicó la masilla, para que toda la puerta quede igual.
4. imprimación
Para facilitar el proceso de pintura, aplique primero una imprimación. Este producto hace que la pintura sea más uniforme y suele reducir el número de capas necesarias. Espere a que se seque y vuelva a lijar. Aquí puede apostar por una lija más fina y no necesita aplicar mucha fuerza. El objetivo es eliminar el exceso de imprimación.
5. aplicación de la pintura
Sigue todas las indicaciones del fabricante sobre la preparación de la pintura. Si has elegido las que son al agua sólo tienes que disolverla en agua. Pon un poco de la pintura ya preparada en la bandeja. Decide si vas a pintar la puerta de madera con rodillo o con brocha, mójala en la pintura y aplícala sobre la madera.
El rodillo es más adecuado, ya que reparte la pintura uniformemente por toda la superficie. La brocha puede dejarse para el acabado y las partes más finas, como los laterales de la puerta o cerca del tirador y las bisagras, si ha optado por no quitar estas partes.
Espere a que se seque y vea si es necesaria una segunda capa, si es así, pinte de nuevo.
No olvides pintar también el marco de la puerta, para renovar el tinte y mantener el mismo color que la puerta. Coloca una tira de cinta adhesiva en la pared, para evitar manchar el tinte de la zona y utiliza la brocha para esta parte de la pintura.
6. finalización
Una vez seca la pintura y aplicadas todas las capas, puedes aplicar un esmalte brillante (si no has utilizado este tipo de pintura) o un barniz para que la pintura dure más tiempo.
Una vez seco el barniz o el esmalte, retire la cinta protectora y vuelva a colocar la parte de la puerta que haya retirado.
Cómo pintar una puerta de madera: cuidados
Algunas precauciones importantes para garantizar que la pintura de la puerta de madera salga como se espera:
Remojar los pinceles en agua
Aunque sólo utilices las brochas para pintar las jambas, recuerda dejarlas en agua durante al menos 12 horas. Puedes hacerlo el día antes de pintar la puerta. Así evitarás que suelten pelos que se peguen a la madera.
Trabaje en un lugar bien iluminado
Lo ideal es que pintes la puerta durante el día, ya que tendrás mucha luz en la habitación. Pero si tienes que aprovechar la noche para la tarea, mantén el lugar bien iluminado. ¿El motivo? Podrás ver cualquier imperfección en la pintura o si se ha quedado algo pegado, como suciedad o pelos de la propia brocha.
Barrer el suelo antes de pintar
Como ha visto en los temas anteriores, tendrá que lijar la puerta varias veces. Para evitar que se pegue el polvo durante la pintura, cambie los periódicos o cartones que utilizó para el revestimiento y barra el suelo antes de ponerse a pintar.
Deje que la pintura gotee un poco del pincel/rodillo.
Antes de aplicar la pintura a la puerta, justo después de mojar la brocha o el rodillo, deja que la pintura gotee un poco, para evitar excesos, de forma que una parte de la pintura quede más oscura que otra. Utilizar la bandeja de pintura ayuda mucho, ya que eliminas el exceso de la brocha y el rodillo allí mismo.
Pintar siempre en la misma dirección
Tanto si utilizas una brocha como un pincel, pinta siempre en la misma dirección. Si has empezado en vertical, debes continuar en la misma dirección alrededor de toda la puerta, y lo mismo si has empezado en horizontal. La idea es evitar marcas y dejar toda la pintura uniforme.
Respetar el tiempo de secado
Entre una mano y otra o acabando con esmalte/barniz, respeta siempre el tiempo de secado. Suele venir descrito en el propio producto, pero podrás darte cuenta cuando la pintura esté seca. Si no esperas el tiempo necesario puedes acabar dejando manchas en la pintura.
Limpiar las brochas y el rodillo después de cada uso
¿Has terminado de pintar tu puerta de madera? Limpia todos los materiales que hayas utilizado. Sumerge las brochas y el rodillo en una solución que disuelva la pintura. Si es al agua, basta con lavarla con agua y jabón y dejarla secar después. Las pinturas al disolvente deberán limpiarse con disolvente.
Envuelve los pinceles en papel de periódico
Cuando los pinceles estén apenas húmedos, envuelve sus pelos en papel de periódico. El objetivo es evitar que se doblen y pierdan su forma, de modo que puedan utilizarse para pintar en el futuro.
Elige colores claros para las puertas interiores
En el interior de la casa, los colores claros son los indicados, ya que dan sensación de calidez y aumentan la luminosidad del ambiente. No tiene por qué ser sólo blanco, pero prefiera tonos más delicados y claros.
Cerrar el bote de pintura después de usarlo
Puedes guardar la lata para utilizarla en el futuro, pero siempre con cuidado de mantenerla bien cerrada y evitar que la pintura se seque.