Sofisticada, atrevida, pop o, quizás, glamurosa, todas estas variantes tienen cabida en una habitación roja, ¿lo sabía?

Y es que el rojo tiene una paleta de colores que abarca todas estas posibilidades.

El rojo brillante y vibrante, como el escarlata, por ejemplo, es la elección adecuada para una habitación lujosa y atrevida. Quienes prefieran algo con cara de riqueza y sofisticación, pueden apostar por una habitación en tono rojo burdeos.

Los más tímidos, en cambio, pueden aportar la viveza del rojo en pequeños detalles de la decoración.

En cualquier caso, siempre puedes crear una habitación roja que encaje perfectamente con tu personalidad.

Así que sigue el post con nosotros que te daremos muchos consejos para hacer una decoración de salón rojo increíble.

Habitación roja: sensaciones y sentimientos

Los colores son capaces de provocar distintas sensaciones y, en el caso del rojo, lo que predomina es el entusiasmo.

Las habitaciones decoradas con color son vibrantes, alegres, llenas de vida y capaces de motivar incluso a quienes sufren depresión, según la cromoterapia.

Pero cuando se utiliza en exceso, el rojo puede provocar agitación y nerviosismo.

Por lo tanto, el consejo es equilibrar siempre el uso del color con otros tonos más suaves y neutros.

Cómo utilizar el rojo en la decoración del salón

El rojo siempre es protagonista, aunque se utilice en pequeñas cantidades. Es decir, siempre que elijas este color, debes saber que destacará, independientemente de los demás tonos que haya en el ambiente.

Pero hay formas de suavizar o acentuar aún más el color, y todo dependerá de cómo vayas a insertarlo en la decoración de tu salón.

Para los que sólo quieren un ligero toque de rojo, la sugerencia es apostar por el color en objetos más pequeños, como cojines, cuadros, lámparas, jarrones y otras piezas decorativas.

Para quienes estén dispuestos a ir un poco más allá, vale la pena insertar el color también en objetos más grandes, como el sofá, la alfombra, la cortina e incluso en algunos muebles, como la estantería, el aparador y los taburetes.

Por último, los más atrevidos pueden invertir sin miedo en una pared roja para el salón.

Cómo combinar la decoración de una habitación roja

Pero no basta con poner rojo en la decoración, es importante saber combinarlo con otros colores, a no ser que quieras una decoración monocromática, que es posible, pero extremadamente atrevida e impactante.

Una de las mejores combinaciones (y que no suele fallar) es la decoración de salones rojos con tonos neutros como el blanco y el gris.

Los tonos neutros más acordes con la paleta amarilla, como el beige, el marfil y el arena, deben utilizarse en decoraciones con tonos más oscuros de rojo.

Otra buena apuesta es la combinación de rojo con tonos amaderados. Esta combinación es perfecta para crear ambientes acogedores, sobre todo si el tono de rojo se acerca a la paleta de tonos tierra.

Pero si su intención es crear algo asombroso, no se lo piense dos veces a la hora de combinar la habitación roja con tonos vibrantes y complementarios.

Buenas opciones en este caso son el azul, el verde, el morado y el amarillo. No obstante, siempre conviene apelar al sentido común y analizar si la decoración no "chirría" demasiado.

Aunque parezca mentira, es posible crear una combinación entre rojo y morado, por ejemplo, de forma equilibrada y armoniosa.

Fotos de decoración de salones rojos para que te inspires

Mucho mejor que la teoría es la práctica, ¿verdad? Por eso, hemos seleccionado imágenes de salones decorados en rojo para que te inspires y las tomes como referencia, ven a ver:

Imagen 1 - Decoración de salón en rojo con sofá y alfombra formando un único bloque de color.

Imagen 2 - Decoración de salones rojos de estilo contemporáneo. Aquí, el tono gris neutraliza el rojo.

Imagen 3 - Colorido y alegre, este salón apuesta por una pared roja con flores para diferenciarse.

Imagen 4 - Salón con pared roja: ¡no hace falta nada más!

Imagen 5 - Lujosa y sofisticada habitación roja que no agobia visualmente la estancia.

Imagen 6A - Salón con cortina roja que también funciona como separador de ambientes.

Imagen 6B - Para crear un ambiente exclusivo, basta con cerrar la cortina roja.

Imagen 7 - Salón con librería y mesa de centro roja. Observa que los tonos, aunque diferentes, armonizan.

Imagen 8 - Un puff rojo y... voilà... el salón ya tiene un nuevo aspecto.

Imagen 9 - Salón con sofá rojo a juego con el cuadro de la pared.

Imagen 10 - Salón rojo y blanco: la combinación perfecta para los que no quieren equivocarse.

Imagen 11 - Salón con pared roja súper relajado. Los cuadros completan aún más la decoración.

Imagen 12 - ¡Rojo para calentar el corazón!

Imagen 13 - Decoración de salones rojos en tono tierra: más cómodos y acogedores.

Imagen 14 - ¿Qué tal una pared roja degradada?

Imagen 15 - Para un salón elegante y moderno apuesta por la combinación de rojo y gris.

Imagen 16 - Rojo en los muebles, blanco en las paredes.

Imagen 17 - El sofá, la alfombra y los sillones rojos destacan en este salón de paredes blancas. El sofá amarillo limón pone el contrapunto en la decoración.

Imagen 18 - La modernidad del gris en armonía con la cálida sofisticación del rojo.

Imagen 19 - Aquí, el protagonismo es para las paredes con rayas rojas y blancas.

Imagen 20 - Salón rojo con detalles de madera, la combinación perfecta para los que buscan comodidad.

Imagen 21 - ¡Rojo monocromo! La iluminación es otro punto destacado aquí.

Imagen 22 - ¿Ha pensado alguna vez en un techo de color rojo vivo para su salón?

Imagen 23 - Rojo y moderno.

Imagen 24 - Aquí, el suelo rojo de estilo retro aporta un toque de nostalgia a la habitación.

Imagen 25 - Salón rojo combinado con madera y tonos amarillos. Máximo confort y acogimiento.

Imagen 26 - Salón rojo y negro: diseño atrevido, pero sin exageraciones.

Imagen 27 - No basta con ser rojo, ¡hay que tener texturas!

Imagen 28 - En esta habitación se alinean tres tonos de rojo, el primero en la puerta y los otros en la pared.

Imagen 29 - ¡Conceptual!

Imagen 30 - Un salón clásico decorado con suelo y media pared rojos. El color rojo también está presente en la alfombra, el sofá, la lámpara y los cuadros.

Imagen 31 - Una solución sencilla y práctica para llevar el rojo al salón: ¡pintar las paredes!

Imagen 32 - Salón con pared roja, super contemporáneo, decorado con cuadros.

Imagen 33 - Salón con alfombra roja. El toque final son los sillones blancos con detalles rojos.

Imagen 34 - Salón rojo y negro: una gran inspiración para quienes deseen utilizar este dúo de colores en su decoración.

Imagen 35 - Aquí, el rojo se acompaña de un delicado estampado floral. Las hornacinas de MDF rojo completan el proyecto.

Imagen 36 - Salón rojo y gris: moderno y elegante.

Imagen 37 - Aquí, la decoración del salón se planteó en tonos rojos y rosas.

Imagen 38 - ¿Y si en lugar de simplemente pintar la pared, hicieras una obra de arte?

Imagen 39 - Salón con pared y techo rojos - ¿te gusta?

Imagen 40 - Alfombra y mesa rojas en contraste con los detalles blancos.

Imagen 41 - Salón con sofá de terciopelo rojo. ¿Quieres más? ¡Pinta la pared de rosa!

Imagen 42 - Habitación gris con detalles rojos para aportar un poco de calidez a la estancia.

Imagen 43 - ¡Atrevida y llena de personalidad!

Imagen 44 - Una pared de color rojo escarlata no es moco de pavo. Habla por sí sola de toda la decoración.

Imagen 45 - ¡Sala roja del suelo al techo!

Imagen 46 - El rojo combinado con el amarillo hace que la habitación resulte acogedora, cálida e íntima.

Imagen 47 - En este otro proyecto, el rojo cerrado aporta sofisticación y elegancia al salón.

Imagen 48 - Monocromo en un entorno conceptual.

Imagen 49 - Salón rústico rojo. La sensación de confort se acentúa aún más con la presencia de elementos de madera y piedra.

Imagen 50 - Para una pared roja vibrante, mantén el resto de la decoración en un tono neutro, preferiblemente blanco.