Paz y tranquilidad: ¿quién no sueña con vivir así? La buena noticia es que este sueño es cada vez más accesible. ¿Sabe cómo? Dentro de una urbanización cerrada.

Este tipo de promoción inmobiliaria está cada vez más en auge en el mercado y no es para menos, ya que los condominios reúnen una serie de ventajas capaces de atraer la atención de cualquiera.

Y si eres una de esas personas a las que les atrae la idea de vivir en una urbanización cerrada, continúa aquí en este post con nosotros.

Hemos elaborado una guía completa con todo lo que necesita saber para vivir en una urbanización cerrada. Sólo tiene que echarle un vistazo:

¿Qué es una urbanización cerrada?

Una urbanización cerrada es un grupo de casas o pisos dentro de una misma zona vallada y protegida del entorno exterior.

En una comunidad cerrada, el acceso está limitado únicamente a los residentes y visitantes debidamente autorizados.

Otra característica de la urbanización cerrada es que está dividida en zonas privadas y zonas de uso común.

En el primer caso, la zona privada es la propia residencia del residente, mientras que la zona de uso común es aquella en la que los residentes pueden socializar y asistir libremente, como canchas, piscinas y parque infantil.

Sin embargo, cabe mencionar que la zona común está destinada únicamente a los residentes del condominio, es decir, no está abierta a la población en general.

¿Cuánto cuesta una urbanización cerrada?

Para vivir en una urbanización cerrada hay que pagar cuotas mensuales a la urbanización.

Esta cuota, denominada cuota de condominio, se destina a pagar los servicios que utilizan todos los residentes del local, como el ascensor, la piscina, los patios, el jardín, el garaje, el alumbrado y el pago de los empleados, como el conserje, el portero, la seguridad y el jardinero, por ejemplo.

En general, cuantos más espacios de uso común haya en el condominio, más cara suele ser la contribución mensual.

Estas cuotas varían mucho de un condominio a otro; los más sencillos, con pocas opciones de infraestructura, cobran cuotas de entre 300 y 500 dólares.

Por el contrario, los condominios considerados de lujo, con una amplia gama de servicios, el precio del condominio puede dispararse a más de $ 2.000 por mes.

También conviene recordar que la cuota de condominio es la suma de todos los gastos que tiene la urbanización a lo largo del mes dividida entre el número de residentes/residencias. Por lo tanto, cuantos más residentes haya, menor será la cuota.

Además de la cuota mensual del condominio, los residentes pueden tener que pagar cuotas adicionales si surge algún imprevisto. Es el caso, por ejemplo, de una renovación o mantenimiento no programados.

¿Paga IPTU la comunidad cerrada?

Sí, el pago del IPTU es obligatorio para todos los inmuebles residenciales, ya estén en régimen de condominio o fuera de él.

La tasa de IPTU se abona directamente al ayuntamiento del municipio en el que está situado el condominio, a diferencia de la tasa de condominio, que se abona al gestor de la urbanización.

El IPTU se cobra en función de la superficie construida de la parcela, por lo que el importe también varía mucho de una casa a otra.

¿Qué ventajas tiene vivir en una urbanización cerrada?

Seguridad

Sin duda, una de las mayores ventajas de vivir en una urbanización cerrada es la sensación de seguridad y tranquilidad.

Todos los condominios tienen, a cierto nivel, sistemas de seguridad y vigilancia.

Además de un muro y una valla, la mayoría de los condominios tienen un conserje con seguridad las 24 horas y un portero para comunicar y liberar a la gente, cámaras de seguridad y alarmas.

En algunos condominios también se puede utilizar la biometría y el reconocimiento facial de los residentes.

Privacidad

La privacidad de tener tu propio espacio sin que nadie te moleste es otra gran ventaja de vivir en una comunidad cerrada.

Esto es posible en los condominios, especialmente para los que viven en una comunidad cerrada, ya que suelen estar más alejados unos de otros.

Y aunque las casas no tengan muros ni vallas, no hay que preocuparse por la intimidad, ya que los residentes comprenden y respetan los límites de cada propiedad.

Tranquilidad

Vivir en una urbanización cerrada también es sinónimo de tranquilidad, paz y sosiego.

No tiene que preocuparse de visitas inesperadas llamando a su puerta ni de vendedores ofreciendo servicios y productos en momentos inoportunos.

Una casa en una urbanización cerrada también garantiza la tranquilidad de quienes trabajan desde casa o de quienes tienen niños pequeños y necesitan asegurarse las siestas durante el día.

Deporte y ocio

Otra gran ventaja de vivir en una urbanización cerrada es la posibilidad de practicar deportes y disfrutar del tiempo libre sin tener que salir de "casa".

Esto se debe a que la gran mayoría de los condominios ofrecen opciones para practicar deportes, como canchas deportivas, gimnasios, pistas para correr y caminar, carriles para bicicletas y, por supuesto, la propia piscina.

Aire libre y naturaleza

Para los que quieren estar más en contacto con la naturaleza, las urbanizaciones cerradas también son perfectas.

Parques infantiles, bosques y rutas de senderismo son algunas de las opciones de ocio al aire libre y contacto con la naturaleza.

Estos espacios también son ideales para quienes tienen hijos pequeños y quieren criarlos con más libertad.

Vivir en comunidad

Mucha gente puede pensar que vivir en un condominio significa aislarse del mundo, pero eso no es cierto, sino todo lo contrario.

Vivir en condominio es una gran oportunidad para crear lazos comunitarios con otros residentes, sobre todo porque lo más probable es que las personas que te rodean estén allí porque tienen las mismas necesidades y valores que tú y tu familia.

En este sentido, vivir en un condominio es una forma de socializar e interactuar con personas más allá de su círculo familiar.

Valoración de la propiedad

No se puede negar que una propiedad en una comunidad cerrada es una gran inversión.

La tendencia es que este tipo de promoción inmobiliaria crezca cada vez más, lo que se traducirá en una revalorización de las propiedades que ya existen en comunidades cerradas.

Practicidad y comodidad

Vivir en una comunidad cerrada también es sinónimo de practicidad y comodidad. Muchas cosas que usted y su familia pueden hacer allí mismo, sin tener que salir de los confines de la verja.

Es el caso, como ya hemos mencionado, de las zonas de ocio y deportivas. Pero algunas comunidades de propietarios ofrecen opciones de servicios aún más completas, como panadería, tienda de comestibles, mercado y farmacia.

Por no hablar de que las nuevas promociones vienen equipadas con espacios corporativos, donde es posible celebrar incluso reuniones de negocios, por ejemplo.

¿Cuáles son las desventajas de vivir en una comunidad cerrada?

Pago de tasas

Una de las principales desventajas señaladas por quienes viven o quieren vivir en una comunidad de propietarios es el pago de las cuotas de conservación y mantenimiento.

Este pago es mensual y obligatorio, es decir, el residente tiene que estar al corriente de estas cuotas. Sin embargo, cabe mencionar que la cuota de condominio varía mucho de una urbanización a otra.

Por lo tanto, es importante investigar mucho y analizar si todo lo que ofrece el condominio tiene sentido para usted. De lo contrario, las probabilidades de pagar por servicios que ni siquiera utiliza son altas.

Otra ubicación

Para poder disfrutar de zonas verdes, tranquilas y apacibles, la mayoría de los barrios cerrados, sobre todo las casas, acaban construyéndose en lugares más alejados de los grandes centros.

Esto no significa vivir en el campo, sino en los alrededores de las capitales, pero esta ubicación puede ser una desventaja para muchas personas, sobre todo para las que tienen que desplazarse al trabajo o llevar a sus hijos al colegio.

Normas estrictas

Vivir en una urbanización cerrada también significa aprender a vivir bajo normas estrictas que deben ser respetadas por todos.

Aunque esto no es necesariamente un problema, es malinterpretado por quienes tienen dificultades para convivir con normas y reglamentos estrictos, sobre todo en lo que se refiere al ruido.

Si usted, por ejemplo, es de los que les gusta hacer fiestas y tiene la casa llena de gente, puede prepararse para tener que lidiar con las quejas de los vecinos y las notificaciones de la urbanización.

¿Cuál es la diferencia entre urbanización cerrada y comunidad cerrada?

Una urbanización cerrada y un barrio cerrado no son lo mismo. Una urbanización cerrada, como ya se ha dicho, es una promoción inmobiliaria construida dentro de una zona amplia, cerrada y aislada, con acceso permitido únicamente a los residentes y visitantes autorizados.

El huerto cerrado es una gran superficie dividida en parcelas y vendida individualmente con autorización del ayuntamiento. La zona del huerto cerrado sigue siendo de dominio público, es decir, las calles se utilizan libremente y no hay control de acceso.

En algunos casos puede haber una verja en el lugar, pero sólo para garantizar una mayor seguridad de las propiedades, sin impedir el acceso de la población en general.

¿Casa en urbanización cerrada o piso?

Cuando hablamos de una urbanización cerrada, nos vienen a la mente esas casas estandarizadas con un bonito césped delante y una piscina detrás.

Pero no todos los condominios son así. Hay complejos de apartamentos, donde uno o varios edificios reúnen viviendas particulares.

Este tipo de condominio es cada vez más común, ya sea por la creciente verticalización de las ciudades o por la facilidad de compra, sobre todo gracias a la financiación inmobiliaria.

Pero la pregunta sigue en el aire: ¿vivir en una casa o un piso en una urbanización cerrada? Depende de varios factores.

Una casa siempre es una casa: tiene más espacio, más libertad y autonomía, mientras que un piso suele ser más pequeño, al igual que la libertad de los residentes.

En general, quienes tienen familia numerosa y niños pequeños casi siempre prefieren vivir en una casa, por la mayor posibilidad de espacio y vida al aire libre. Para quienes viven solos o en pareja, un piso puede ser una gran opción de vivienda.

Recordando que en ambos tipos de condominio, los servicios ofrecidos suelen ser los mismos, es decir, es posible contar con piscina, canchas, salón de fiestas, parque infantil, entre otras áreas comunes sin importar el modelo de vivienda.

¿Cuáles son las normas y obligaciones de una comunidad cerrada?

Las normas y obligaciones dentro de una urbanización cerrada varían mucho en cada urbanización. Pero, algunas normas son comunes a prácticamente todas ellas. Vea cuáles son:

• Velar por la limpieza y organización de las zonas comunes del condominio;
• Respetar las normas de silencio establecidas en la asamblea;
• Cuida de las mascotas para que no se queden solas ni amenacen la integridad de los demás;
• Elimine la basura correctamente;
• Pagar puntualmente la cuota de condominio;

¿Cómo elegir una casa en una urbanización cerrada?

Ubicación

Una de las primeras cosas que hay que tener en cuenta antes de elegir una propiedad en una urbanización cerrada es la ubicación.

Considere las necesidades de desplazamiento de toda su familia. Quienes se desplacen al trabajo, al colegio o lleven a sus hijos a la escuela deben evaluar las condiciones de acceso, ya sea en coche privado o en transporte público.

Un condominio demasiado alejado de estos puntos de interés puede no ser la mejor opción.

Estilo de vida y necesidades personales

Otro factor importante a considerar es su estilo de vida y sus necesidades. Vea si el condominio ofrece toda la infraestructura necesaria para que usted y su familia vivan cómodamente dentro de lo que es importante para usted.

A menudo, pagar una cuota de condominio elevada puede no ser necesario, ya que la infraestructura ofrecida no se ajusta a la realidad de la familia.

Presupuesto familiar

Por último, pero no menos importante, está el presupuesto familiar. Es importante tener en cuenta que la cuota del condominio deberá pagarse mensualmente, por lo que debe incluirse en la hoja de cálculo de gastos de la familia.

Por eso, considere propiedades que tengan cuotas de condominio que se ajusten a su bolsillo, ¿de acuerdo?

Entonces, ¿vivir en una comunidad cerrada es para usted? Ahora sólo tiene que encontrar su propiedad ideal y dar el paso.